La última
y nos vamos
Por JESÚS
SOSA CASTRO
Como en ningún otro año, el 2025 estuvo lleno de
acontecimientos importantes. El proyecto de la cuarta transformación dejó sin
calzones a una oposición vanidosa, ignorante y estúpida. Les llovió feo, por
más que trataron de defenderse como fuerza política lo real es que terminaron nadando
en su propio fango. Sus esfuerzos por carcomerle el corazón a Morena y a su
gobierno terminaron siendo un Frankenstein atolondrado. No pudieron ni podrán con
un proyecto de gobierno que el pueblo ha hecho suyo para siempre. Lo abraza y
lo protege porque ha nacido de sus entrañas y porque por sus venas corre la
sangre de los que, por años, fueron masacrados económica y políticamente por un
atajo de hambrientos de poder y privilegios
Pero hay una cosa, entre muchas, que no quieren ver ni
entender los fachos silvestres. Tenemos mucho pueblo y mucho gobierno. Basta
que se convoque a la gente a defender su proyecto de transformación y
civilizadamente llena calles y plazas del país. El entusiasmo que expresa no es
artificial, brota espontáneamente porque es, en justicia, lo que ella esforzadamente
ha construido en todos los rincones de la patria. Y esto, estimados lectores y
amigos me llenan de contento. Porque mi persona, mi ánimo y mi apoyo a las
causas del pueblo han acompañado a los mexicanos que del brazo de AMLO y de
Claudia, están limpiando al país de las alimañas que por décadas hambrearon al pueblo,
sembraron odio y quitándole el derecho de vivir en libertad y democracia
Estas largas jornadas de lucha han ventilado el ambiente
político y nuevos aires circulan en el ánimo de la gente. Y es que, no es para
menos lo que hemos hecho como pueblo. Hemos defendido nuestros derechos,
encuerado a los conservadores y los hemos echado en el bote de la basura política
donde, seguramente, seguirán llorando y rezándole a los gringos para que vengan
a salvarlos de los “comunistas” Yo, como muchísimos mexicanos, sé que los años
que vienen van a ser muy difíciles, nuestros adversarios están heridos de
muerte y pueden escalar actos llenos de rencor y de estupidez. Para estar en
condiciones de enfrentarlos y derrotarlos otra y otra vez, es necesario agruparnos
y agrandar nuestra fuerza. Tomar nuevos aires y volver en enero llenos de ánimo
y de ideales para seguir avanzando en nuestro proyecto que mucho esfuerzo le
hemos puesto en su construcción
Yo por lo pronto me voy un mes de vacaciones a partir de la
publicación de esta última nota. Quiero poner en movimiento mis huesos caminando
por las veredas que me vieron nacer. Voy a ver los montes y los barrancos que
en mi niñez me llenaban de oxígeno y de sueños y que abandoné por venirme a la
ciudad. Hoy repasaré esos caminos, y si logro poner mi cuerpo y mi cerebro en
condiciones de seguir escribiendo y haciendo algo más por mi país, nos
volveremos a encontrar después del 15 de enero del 2026. Mientras tanto, disfruten
lo votado, abracen a su gente y siempre valoren los avances políticos y
sociales que todos estamos construyendo. Los abrazo por siempre