jueves, 28 de septiembre de 2023
Te lo escribiré, le dije. Hoy estoy cumpliendo mi palabra Por JESÚS SOSA CASTRO El martes 26 de septiembre, me acosté leyendo El libro de los abrazos. Mentalmente describía la pequeña muerte de la que habla Eduardo Galeano y la comparaba con los amores insomnes de Mario Benedetti. Mi veta imaginaria volaba incansable para transformar la lectura en un ventarrón de ideas y de querencias. En el fondo, como que asomaba el reclamo de las mujeres que se han atravesado en mi vida y que, olvidadizas y desamorosas como son, protestaban por mis constantes omisiones involuntarias. Sentí que algo me presionaba para intentar romper las entretelas de mis sentimientos profundos. Las cosas querían salir como si fueran gacelas que recién logran su libertad ¡No me di cuenta a qué horas me dormí! En consecuencia, no pude medir el tiempo. Una vez que lo logré, tres o cuatro horas fueron suficientes para elucubrar, para dar cuerpo y forma a un fantástico animal parecido a un camello con la cara del Guernica de Pablo Picasso. La embestida y la fuerza de éste, agrietaron mi subconsciente, y en una loca y desenfrenada carrera hacia un lugar mítico, me hizo correr desaforado y perseguido por una multitud trotante que me arrollaba. Todo era cuesta abajo, sin sentido y sin poder explicar lo que pasaba. Un camello con cuernos, hambriento y mitológico, corría tras mi humanidad desbrozándolo todo. En su mirar, no pude descubrir el porqué de su delirante persecución. ¿Algo estaba pasando por mi cerebro? En el entorno de mi sueño había una cerca de alambre, arbustos, polvo y gente, mucha, mucha gente. Paralelamente y en competencia similar, también venían, frenéticos, casi levitando, muchos personajes enmudecidos, pero en sus rostros, se mostraban la fuerza, la decisión y el valor para enfrentarse conmigo Yo veía como avanzaban los tumultos, cada cual por su lado. Corrían en la misma dirección, como perseguidos por los mismos fantasmas. En esa carrera incontinente, jadeante y con rostro hermosamente descompuesto, aparecía una hermosa mujer, que, a borbollones, le salían palabras en un desenfrenado afán de detener las muchedumbres. Junto a mí se oía fuerte su voz. ¡Traigo en el bolso algo para huir! Corre, corre. Y yo corría, empujado por los gritos de esa multitud invisible que me arrinconaba y me atropellaba sin piedad. Tal fue mi carrera que me desperté. Me escurría el sudor y esa mujer que corría conmigo con un racimo de flores, me aseguraba que éstas serían nuestra salvación La muchedumbre seguía empujándonos con fuerza a la mujer y a mí. Íbamos juntos en un mar de gente sin rostro, perdidos y sin rumbo. De pronto llegamos a la parte baja de esa montaña de la que veníamos rodando. Éramos un alud que escapábamos de algo. Huíamos, queríamos salir de allí y refugiarnos en otro lugar que tampoco sabíamos donde se encontraba. La marea se hacía un remolino y nos juntaba a gran velocidad. No había manera de escapar. Alzábamos los brazos, gritábamos sin ser escuchados por nadie. La marea seguía, iba perdida en una carrera sin sentido y viajando hacia el infinito. No sabíamos quién nos empujaba La mujer y yo caminábamos juntos, agobiados. Mirábamos a nuestro derredor y Pumo, el fantástico animal que parecía camello, con la cara del toro de Picasso, abría sus fauces enloquecido por la ira persiguiendo a mi acompañante. Parecía que la pelea era contra ella. No obstante, nos protegíamos mutuamente ante un incierto terminar. Por más que éramos llevados y traídos por esa marea caótica, el abrazo protector no se rompía. El fantasma con jorobas y cuernos se estiraba para arrebatármela, y su largo pescuezo acercaba su aliento a su cara con un aire de ensoberbecido triunfo. De un solo movimiento, los gruesos belfos del animal atraparon el rostro pálido de la señora, envolviéndola en un enloquecido beso, estremecedor, lleno de pasión y de hartazgo animal. Me desperté. Busqué la manera de serenarme. Tomé otra vez El libro de los abrazos y leí “No nos da risa el amor cuando llega a lo más hondo de su viaje, a lo más alto de su vuelo, porque nacer, es una alegría que duele” (*) No era fácil entender lo soñado. Pero en los intersticios de mi mente, Pumo adquiría el rostro de Canek. Peleaba contra el fantasma de las jorobas que abusivamente quería besar a su madre. En ese momento percibí que el camello con la cara del Garnica de Picasso, había desaparecido. Las muchedumbres habían huido cuesta abajo. Ya consciente, me puse a buscar la explicación de este sucedido. Obvio, no la encontré. El día 27 nos fuimos a desayunar Carmen y yo. Le hablé de mi sueño. Tal vez, concluimos, los fantasmas que aún pululan por ahí hay que derrotarlos, no en los sueños sino en la realidad que ya viene caminando. De regreso, le dije, ¡lo voy a escribir! Hoy estoy cumpliendo mi palabra (*) El libro de los abrazos, Eduardo Galeano, Siglo XXI Editores
lunes, 25 de septiembre de 2023
Entre el
orgullo y la decepción
Por
JESÚS SOSA CASTRO
Para millones de mexicanos, los resultados de las
cinco encuestas para ver quién coordinaría los comités de la 4t, fueron una
enseñanza democrática muy importante. Miles y miles de mujeres y hombres tuvieron
la oportunidad de oír y valorar las ideas y las propuestas que los seis
participantes les hicieron. La politización y la sabiduría del pueblo, decidieron
claramente que la coordinación nacional del movimiento, estuviera en las manos
de la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo. Esta decisión, quiero repetirlo, me llena
de contento porque, aunque mi candidato era Gerardo Fernández Noroña, la
actitud de éste, la mía y la de miles de seguidores de la transformación,
pusimos por delante la madurez política y la convicción para que la unidad, la inteligencia,
el trabajo y la honestidad que arropan a Claudia, fueran el signo y el símbolo para
que llenen de orgullo a todos los que luchamos por los cambios en el país
Pero hay un dicho popular que afirma que siempre hay
alguien que deja caer el moco en el atole. Está visto que la cultura política
que ha traído consigo la cuarta transformación, también ha despertado el
oportunismo, las ambiciones personales y la traición de algunos que presumían principios
y convicciones de manera artificial. Creen que la Coalición Juntos Hacemos
Historia puede alimentar su ego y hacerlos ver como lapas en busca de poder y dinero.
No están entendiendo nada de lo que significan los nuevos tiempos de la
política. Ahora es el pueblo, el que antes estuvo sometido al control
ideológico y a la ignorancia, el que decide los liderazgos y los encargos a
partir del trabajo, la lealtad y los ideales en los que se contienen las
necesidades y demandas de la gente
Esos personajes que no aprendieron nada en estos
últimos cinco años del gobierno de López Obrador, de manera lastimera y ruin,
están desconociendo las decisiones del pueblo que, en encuestas acordadas,
controladas y vigiladas por representantes de los contendientes, dieron el
triunfo legítimo a la mujer que hoy vuelve a los recorridos por el país para
organizar a los comités de la 4t que la llevarán a la presidencia el 2 de junio
del 2024. Lo que hacen Marcelo Ebrard, Ignacio Mier y sus seguidores, no solo es
oportunismo y ambición sino un ejercicio despreciable y traicionero. No se han
dado cuenta que la gente es la principal impulsora del pensamiento democrático
y de acciones justicieras, las cuales, se opondrán de manera firme a los busca
huesos llevando hasta el final la lucha contra la cultura del agandalle, la traición
y el oportunismo
Es difícil que estos personajes puedan ocultar sus
acciones y sus intereses. La gente ya está enterada de las reuniones en lo
oscurito para trazar una estrategia con la cual puedan chantajear a los
organizadores de los comités de la transformación y exigir cuotas de poder a
cambio de no votar EN CONTRA del presupuesto de ingresos enviado a la cámara de
diputados. La alta traición que están preparando los va a hundir de manera
irremediable. Si eso buscan y en eso trabajan, operará la frase del clásico que
estuvo en los pinos: “Hay se los haiga”
Por lo que toca a Morena, PT y Verde están ratificando
otra vez su decisión de ir en unidad al lado del pueblo en los comicios de
junio del año que viene. Como militantes de estos partidos, estamos seguros de
que no habrá traición y chantaje que pueda cambiar el rumbo y el destino que la
mayoría de los mexicanos nos hemos propuesto profundizar. Tenemos proyecto,
candidato, equipo y decisiones que vienen de lo más profundo del corazón, de
los ideales y convicciones del pueblo. Por segunda ocasión, el voto de los
electores va a quedar registrado en los anales de la historia a favor de los
patriotas y luchadores mexicanos
Los que coquetean con la derecha, los que están
traicionando al pueblo con sus actitudes y con sus acciones, no tienen futuro
en las filas de quienes luchamos por la democracia, las libertades y la
justicia. Lo importante es que las filas de la izquierda y de los demócratas
auténticos, se está limpiando de moscas y cacomixtles. Los que estamos del lado
de estas fuerzas, vamos a vivir otra proeza en el año por venir. A los
chaqueteros, traidores y arribistas, les deseamos que su derrota les sea poco
dolorosa y que la derecha con la que andan en abierto maridaje, no los trate
con el desprecio con que está tratando a su botarga. Hasta nunca, baibys
jueves, 21 de septiembre de 2023
Las
vergüenzas que se ocultan debajo del huipil
Por JESÚS
SOSA CASTRO
Los derechosos se encuentran apanicados. Su botarga, inflada
hasta el hartazgo de manera artificial por un grupo de traficantes de
influencias, corruptos y ladrones, se está cayendo a pedazos. Y es que la derecha,
todos lo sabemos, está huérfana de líderes, de programas, de moral, de ética y
de pueblo. No saben ni entienden que el proceso electoral en el que se habrán
de elegir al presidente de la república, más de 20,000 cargos, entre ellos 128
senadores, 500 diputados federales; nueve gubernaturas, 31 congresos locales,
alcaldes y regidores, no lo podrán resolver porque no tienen nada de lo que se
necesita. ¿De dónde van a sacar a tantos funcionarios con credibilidad si los especímenes
que los dirigen son el gerente Claudio X González, Xóchitl Gálvez, Alejandro
Moreno, Chucho Zambrano, y Marko Cortés puros rateros, huevones y pendejos?
Aun no empiezan las campañas oficiales, y la crisis que vive el
Frente X México, le está reventando por todas partes. Lo primero que se ve, es
que por lo que representan y son, los dirigentes de los tres partidos que
apoyan a la Móchitl no la acompañan en sus actos. No quieren ser vistos por la
gente porque ésta sabe lo que cargan entre pecho y espalda. Por eso la señora va
sola por el país haciendo y diciendo barbaridades. Siempre dando pena ajena. Sus
chistes, sus propuestas, su comportamiento no solo son frívolos, vacíos y francamente
reaccionarios. Cree que el pueblo sigue viviendo los años en los que los señores
de horca y cuchillo engañaban a la población con un discurso vacío, demagógico
y falaz.
La señora de la bici y sus apoyadores creen que van a ganar
el apoyo del pueblo sólo mostrando el volumen que está debajo del huipil. Todas
las porquerías que oculta esta corrupta, mentirosa y plagiaria, no es materia programática
para hacerse de la presidencia. ¡Basta rascar un poquito para que salga el pus que
trae debajo de las enaguas! ¿Quién es y que propone esta señora? Por principio
de cuentas es una mujer inmoral, ignorante y corrupta. Ya tiene en su haber
tres demandas judiciales ante la fiscalía general de Justicia de la CDMX: Plagio
en su trabajo de titulación, Enriquecimiento ilícito, Tráfico de influencias, Conflicto
de interés y Corrupción. Todos estos actos fueron cometidos durante su gestión
en la entonces delegación Miguel Hidalgo. A la hora en que pida licencia para
ausentarse del senado para empezar su campaña, las autoridades le echarán
guante por las tropelías y arbitrariedades cometidas
Desde que los capitostes la hicieron candidata de la
oligarquía, sus padrinos y asesores políticos le dejaron ir un montón de
propuestas en las que se manifiesta no solo la ignorancia y lo derechoso de las
mismas, sino la estupidez que está cometiendo al hacerlas sus propuestas de
gobierno. Claudio X González, Vicente Fox, José Ángel Gurría, el Saco de pus, Denisse
Dreser y otros corrupto y amargados, le han metido en la cabeza las propuestas
de quitar las pensiones a los adultos mayores, que los trabajadores al servicio del Estado paguen
70 mil pesos de seguro médico personal, regresar la pensión a los ex
presidentes, eliminar programas sociales para no inducir el voto, aumentar el
4% al presupuesto del poder judicial, abrir las puertas a la inversión privada
en Pemex y en la Industria eléctrica, cerrar las obras faraónicas como la
refinería dos bocas, el tren maya y el AIFA, recuperar becas a empresas que
tenía el Conacyt, volver al Seguro popular y dar a la Cofepris las funciones
que tenía. ¿Cómo la ven?
La falta de profesionalismo, más la incultura, la vulgaridad,
la corrupción y los plagios, sumado todo a las propuestas regresivas de Chóchitl
Gálvez y de sus corifeos, los hacen merecedores del desprecio popular y de la
negativa de éste a darles el voto que andan mendingando. El pueblo ya hace tiempo
que salió del marasmo en que lo metieron los que pensaron que eran dueños del
país. En otros tiempos, seguramente podían confundir a los electores y hacerlos
víctimas de sus engaños, robos y triquiñuelas. Pero para su desgracia, la gente
ha tomado en sus manos las decisiones que tienen que ver con su destino y con
su futuro
El 2 de junio del 2024, México tendrá una presidente que
conoce el país, que quiere a su gente, con experiencia política y
administrativa. Con un programa de gobierno de cara a las necesidades y
exigencias del pueblo. A ese pueblo al que los derechangos le quieren quitar sus
conquistas sociales y políticas. Pero no podrán retroceder la rueda de la
historia. Sus transas, sus corruptelas y sus privilegios ya no volverán. Con Claudia
Sheinbaum, nuestra futura presidenta, estará todo un equipo de políticos escogidos
por el pueblo, no habrá malandrines ni oportunistas en los encargos. Estarán
los conocedores de los problemas del México profundo y todo un pueblo empujando,
para bien, la profundización del proyecto de la 4a transformación
domingo, 17 de septiembre de 2023
El cuerpo
y el alma de las utopías mexicanas
Por JESUS
SOSA CASTRO
Del 13 al 16 de este último septiembre, vimos en el centro y
en todo el país, una expresiva manifestación de contento, de patriotismo y de una
desconocida, fraternidad entre distintos sectores del pueblo mexicano. Del lado
de los que perdieron el gobierno, los privilegios y los espacios los que lucían
su condición de lamebotas del presidente en Palacio Nacional, se quedaron disfrutando
desde sus casas, los sentimientos de la nación. En estos actos patrióticos hubo
representaciones de distintos países a los que abrazamos con todo respeto y
cariño. Su presencia contribuyó al encabronamiento de los engominados y señoras
copetonas que antes se pavoneaban como las codueñas del poder
En los tiempos de los gobiernos neoliberales, las fiestas
patrias requerían de un escaparate para exponer los recursos patrioteros, la
modernización de las armas y la preparación del ejército y la armada, soportes
de gobernantes repudiados. Curiosamente, la prole en rebeldía no se iba con la
finta. Le cobraba la afrenta el mismo 15 de septiembre y en muchos actos
públicos gritándoles espurios y represores. Los días posteriores, las protestas
cimbraban al régimen y criticaban el comportamiento policíaco militar que
habían mancillado, otra vez, los espacios del pueblo
Desde entonces a la fecha, se ha librado una lucha importante
por la recuperación de esos espacios que han sido el centro de luchas
históricas. El pueblo hoy, se está convirtiendo en un ejemplo a seguir. En las
calles y plazas hay una creciente franja social que defiende sus derechos y también
una pequeña franja de intelectuales que están al servicio de la transformación.
Están desenmascarando a los antiguos gobernantes que tomaron por asalto el
centro cultural y político de la nación
Los mexicanos siempre supimos cuál era el nivel cultural de esos
gobernantes. No hacía falta que lo estuvieran exhibiendo todos los días. Presumían
sus debilidades al través de un afrentoso desdén por los libros y por la
inteligencia del país. Se habían fabricado una fama en la que rebotaban los
elementos que, en políticas educativas, bibliotecas y bardas, sembraron con
enorme convicción popular José Vasconcelos y Jaime Torres Bodet. A esos
políticos del país, les falto siempre lo que Malala Yousafzai, hizo retumbar en
las paredes de la ONU el 11 de octubre del 2013, candidata al premio Nobel de
la Paz: “para que un país pueda triunfar -dijo- hay que educar a los niños,
tratar bien a los maestros, leer libros y usar lápices en lugar de fusiles.
Esto es lo único que cambiará el destino del mundo” (1)
En estas últimas fiestas septembrinas realizadas en el corazón
de México, el jefe del ejecutivo federal, ha puesto de relieve la cultura y la
historia, poniendo en juego las normas de la convivencia universal. La
conmemoración fue la presencia de la paz, la cultura y el contento de la
mayoría del pueblo mexicano. Quienes antes reclamaban derechos, prestaciones,
libertades y democracia son ahora los principales impulsores de los derechos
ciudadanos y de nuestras tradiciones culturales. Estos sectores, han
multiplicado sus filas porque las acciones de gobierno ya no les inspiran ni miedo
ni terror
Los funcionarios
públicos transmiten a la gente, aquello de lo que habló Ernest Cassirer en su
Introducción a una filosofía de la cultura “al lado del lenguaje conceptual,
lógico o científico, siempre hay un lenguaje de la imaginación poética” (2) Esto
lo están entendiendo los gobernantes porque en la mayoría de ellos hay
capacidad, entendimiento y cultura. Han entrado al cuerpo y al alma de las
utopías. Están recogiendo las voces del pueblo de aquí y de allá, están leyendo
las historias individuales, y hacen de ellas una historia general, en la cual
se puede oler y tocar el amor, la fraternidad y la esperanza
Antes, el mundo de
las letras le era ajeno a los políticos. Por eso siempre prefirieron tener
lejos a los que piensan, a los que leen, a los poetas. Lo que tenían cerca era
a los lambiscones, a los queda bien, a los represores. No eran capaces de
entender lo que Eduardo García Barros escribió: “Soñé que soñando estaba, porque
soñando debía, que aquel sueño que tenía, fuera el sueño que quería” (3) Los
personajes que mantuvieron el timón de México vivieron y actuaron en la oscuridad.
Pero hoy, en los parques públicos, jardines, y calles de la capital y del país,
ya corren los niños y descansan los ancianos. Ya estamos empezando a disfrutar la
felicidad
(1)información sacada de internet
(2)Filosofía de la cultura, Editorial FCE
(3)Citado por Elena Poniatowska, La noche de
Tlatelolco
miércoles, 13 de septiembre de 2023
Ojalá
nuestra Coalición no se llene de tribus como en el PRD
Por
JESÚS SOSA CASTRO
La forma en que el presidente y los partidos de la
Coalición Juntos Hacemos Historia resolvieron la coordinación para la defensa
de la 4t y en el futuro cercano la candidatura a la presidencia de la
república, no solo fue un hecho inédito, sino el reconocimiento y la convicción
de que es el pueblo y no las cúpulas las que toman las decisiones importantes
respecto de quienes lo deben gobernar. La responsabilidad recayó fundamentalmente
en el Comité Nacional de Morena y en su Consejo Nacional. En su momento, yo critiqué
que, al PT y al Verde, en la decisión inicial, sólo fueran convidados de piedra
Sin embargo, me satisfizo enormemente que todos los
partidos y sus dirigentes estuvieron a la altura de las circunstancias. Los
aspirantes se apegaron a las reglas, hicieron su trabajo, recorrieron el país,
hablaron con la gente y al final, los resultados fueron dados por cinco
encuestas, las cuales, dieron el triunfo inequívoco a la Dra. Claudia Sheinbaum.
Mi candidato era Gerardo Fernando Noroña. Su capacidad y su forma de hacer política
y acercarse con el pueblo me llevaron a creer que sus partidarios lo íbamos a hacer
ganar. ¡Nos equivocamos! Pero por lo menos en mi caso, sostengo que la derrota
ha puesto de manifiesto la grandeza, la honestidad, la lealtad al proyecto y las
virtudes de un político de talla descomunal
Después de que el Comité Nacional de Morena y el Consejo
Nacional le entregaron la constancia de mayoría a la Dra. Claudia Sheinbaum, mi
orgullo y mi apoyo a todos los que hicimos posible este primer paso
democrático, se han hecho mucho más grandes y mi satisfacción se ha
multiplicado por los avances políticos que todos los hijos del pueblo estamos
logrando. Estoy convencido que no solo
vamos a ganar la presidencia de la república, sino los dos tercios del Congreso,
las gubernaturas, los congresos locales, alcaldías y demás encargos. Confío en
el pueblo y en su capacidad política, porque estamos entendiendo y actuando en
razón del importante proceso democratizador que se viene abriendo paso desde el
1º de julio del 2018
Sin embargo, quiero poner en blanco y negro algunas
preocupaciones que me están surgiendo una vez que veo el comportamiento de algunos
aspirantes parecido al que vivimos en el PRD. En este partido había un montón
de tribus con sus respectivos liderazgos. Cada tribu obedecía a sus dirigentes
y no a la dirección del PRD. Predominaron los intereses de grupo y los
encargos, entonces puestos, que se repartían atendiendo a la fuerza y a las presiones
que ejercían esos grupos. El resultado final es la caricatura de partido que
ahora anda dando lástimas y vergüenzas en los corrillos de sus jefes, el Señor
X, el PRI y el PAN
Ese viejo oportunismo está asomando el rostro en
Morena. Si como aspirantes firmaron un acuerdo y sabían de las reglas a las que
estaban obligados a cumplir, si fueron testigos de la aplicación de los
acuerdos, si se cuidó el proceso de las encuestas, ¿por qué los aspirantes que
fueron derrotados, excepto Noroña y Manuel Velazco, se presentan como grupos de
presión ante la ganadora del proceso? ¿Cuál es su pretensión? ¿Quieren negociar
encargos a partir del porcentaje de votos que obtuvieron en las encuestas? ¿Se
quieren mantener como grupos de presión, es decir, como tribus, para exigir prebendas
y derechos que sólo deben darse en razón del trabajo, la honestidad, los
ideales y la lealtad al proyecto de transformación y no a intereses personales
o de grupo?
Me parece urgente y necesario alertar a los
responsables de encauzar y dirigir este importantísimo proceso no sólo inédito
sino como expresión incuestionable de la rebeldía democratizadora de nuestro
pueblo. Como tal está harto y cansado del oportunismo de izquierda y de derecha
y, sobre todo, de las decisiones cupulares. El caso de Marcelo es el colmo del
oportunismo y de las ideas conservadoras que se metieron, o las metieron, a un
proceso politizador diferente y que se quebraron a la mitad del camino porque
en esencia ni en él ni en sus seguidores existen la fortaleza ideológica,
programática y política, para dar el trabajo y la vida por la democratización,
la justicia y la libertad. Resultaron unos pájaros nalgones que buscaban seguirse
alimentando del esfuerzo, de los ideales y del empuje del pueblo por cambiar las
cosas en el país. No está bien que se vayan, pero tampoco son indispensables
para sacar adelante un proceso que huele a pueblo y no a la boñiga de los que
siguen al carnal