El ser
humano, las guerras y la venganza de la naturaleza
Por
JESÚS SOSA CASTRO
En estos últimos días, dos tragedias sacuden a gran
parte de la humanidad. Los crímenes que los gobernantes de Israel y sus aliados
están cometiendo contra el pueblo palestino y la tragedia contra el pueblo
guerrerense que la naturaleza con el huracán Otis, conmocionó al pueblo y al gobierno
federal. Escritores y gente de muchas partes del mundo han llenado plazas y
calles manifestándose contra el genocidio del gobierno israelita contra el pueblo
palestino. En Guerrero, miles de personas vieron pasar un huracán que vomitaba tempestades,
ráfagas de lluvia y viento que destruía todo lo que encontraba a su paso. ¿Qué
pasa con el ser humano y por qué la naturaleza se violenta contra éste?
En su hermoso libro La guerra no tiene rostro de
mujer, Svetlana Alexiévich, hace una pregunta estremecedora. ¿Cómo explicarse que
veinte millones de personas caídas en la URSS, hayan abierto en balde una senda
en el vacío? ¿Por qué esta inconcebible capacidad del ser humano para matar? La
poesía y la obra literaria de Svetlana se han convertido, en un canto a la
liberación de su patria y en dar a conocer al mundo el papel heroico de un
millón de mujeres que lucharon y murieron por echar de su enorme territorio al
fascismo alemán. Su obra es una poesía
“cívica” porque es una poesía contra el poder, contra el olvido y a favor del
amor a la libertad
Pero hay gobernantes como los israelíes en los que les
está saliendo racismo de sus entrañas. Su odio contra el pueblo palestino, contra
sus mujeres, jóvenes y niños que amor a su patria están ofrendando todo, su
juventud y su valor. El honor, la ternura, la valentía y el arrojo para
defenderse de los agresores de su país que, en 1949 se apropiaron de su
territorio por la fuerza de las armas. Da pena y rabia comprobar que el
occidente, con los EU a la cabeza, quieran destruir al heroico pueblo palestino.
La razón la tiene este pueblo. Por eso se justifica la pasión y la valentía con
que miles y miles de niños, jóvenes, pueblo y soldados, defienden a su patria
Los pueblos del mundo estamos haciendo un hermoso recogimiento
de una verdad que, por años, los imperios y sus instrumentos de manipulación y
de guerra, le ocultaron al mundo. Pero hoy, el heroísmo insumiso de millones de
personas en el mundo está haciendo posible la construcción de otra historia.
Una historia que reconstruye el entorno perdido en tragedias naturales como en
el caso de Guerrero con el huracán Otis. De estas tragedias, surgirá un enorme
almácigo de vida y alcanzará su plena floración con el levantamiento de los
pueblos que, desde ya, están luchando por alcanzar la justicia, la libertad y
la paz. Porque lo más espantoso de la vida, son las guerras, los desastres
naturales, la pobreza y la muerte
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