martes, 26 de diciembre de 2023

 

¿En qué se convirtieron mi libertad y mi pensamiento?

Por JESÚS SOSA CASTRO

Cuando dejé la montaña para salir a estudiar, empecé a sentir que estaba haciendo uso de mi libertad. Soñé que empezaba a recorrer un camino inédito, solo acompañado por las consejas sabias de mi padre, un campesino que se había hecho hombre al amparo del trabajo y la tranquilidad que dan los arroyos de las montañas. Ni mis ojos ni mi pensamiento me permitían orientar mis pasos hacia algo previsto o hacia un futuro promisorio. Solo había en mi mente las narrativas de mi progenitor que, en el curso de las noches llenas de luciérnagas, me decía que “Si un día me perdía, observara la hermosa estrella que en el campo llamamos la Cruz del sur. Ella te llevará hacia el rumbo que quieras recorrer”

Lo real es que en estos comienzos las decisiones nunca fueron mías. Influencias familiares sobre mis padres hicieron que me separara de ellos, aunque, a decir verdad, sus consejos siempre estuvieron pegadas a mi adultez. En ese recorrido incierto me fui encontrando con otros mundos. Todos dependían unos de otros, y yo, aprisionado entre ellos, deseaba liberarme para dar contenido a mis acciones y a mi pensamiento. Todo tardó muchos años para que éstos empezaran a jugar su papel. Mis viejas ataduras culturales y las arraigadas costumbres familiares, encontraron en mis lecturas lo que Jorge Luis Borges años antes escribió en el Aleph: “de todos los instrumentos del hombre, el más asombroso es el libro”

Este descubrimiento me empezó abrir los ojos y el entendimiento. De pronto, mis viejas amarras se empezaron a romper al lado de las luchas estudiantiles, magisteriales, sociales, electorales, políticas y partidistas. La libertad que buscaba me llevó al lado de Othón Salazar, Valentín Campa, Demetrio Vallejo, Ramón Danzós Palomino, Lucio Cabañas y muchos más compañeros y camaradas. Fue entonces que empecé hacer uso de mi derecho, de mi libertad y de mi razón, para militar en el Partido Comunista Mexicano, en el PMS, PSUM, PRD y ahora en Morena. Mi pensamiento y mi acción siempre estuvieron en la izquierda. Viví, luché y sigo haciéndolo por la libertad, la justicia y la democracia. Ni antes, ni ahora, ni nunca, tuve ni tendré algo en mi ser, que me avergüence

Mi felicidad actual no tiene nada que ver con lo material. Son mis derechos, mi libertad y mis causas las que me proveen de orgullo, contento y satisfacción. Fui y soy una persona más de los millones de mexicanos que estamos construyendo otro país. Lo que me queda de vida se lo seguiré dando a mi gente, a los que, como yo, estamos haciendo de nuestra libertad y de nuestras acciones, un proyecto de una nueva nación. La meta inmediata es alcanzar el triunfo de Claudia Sheinbaum a la presidencia de la república el 2 de junio del 24, barrer a los corruptos del poder judicial, hacer que el movimiento de la 4t sea fortalecido, transformado, asumido y valorado por los de adentro y por los de afuera. Que sea capaz de ligarse a las luchas sociales, librarse de los corruptos y oportunistas y convertirse en el instrumento para profundizar la transformación de México. Esto es lo que quiero que signifique la libertad, el pensamiento y las acciones de ese pueblo irredento que se mueve en el horizonte político del país. Ese pueblo que organiza y hace una revolución que potencia y pone al país en la cúspide de la justica, la democracia y la libertad. Ese es mi objetivo inmediato. ¡Nada más, pero nada menos!

 

 

 

 

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario