domingo, 31 de agosto de 2014

Burguesía parasitaria, partidos paleros y resistencias populares
Por JESÚS SOSA CASTRO
Según el Ing. Eduardo Gomezcaña Flores, egresado del Instituto Politécnico Nacional, combativo luchador social y estudioso del capitalismo en México, dice que en el país hay cerca de dos mil espacios de conflictividad social. Las llama “Resistencias Populares” Muchas de ellas son movimientos reivindicativos, impulsados por sindicatos, organizaciones campesinas, populares y formaciones sociales diversas. Otros son los partidos políticos cuya actividad preponderante es   la disputa por los espacios del poder estatal. Los primeros exigen solución a sus demandas laborales, de seguridad social, servicios urbanos, derechos humanos, seguridad pública, defensa de las riquezas naturales, reconocimiento a sus sindicatos, autodefensas contra el crimen organizado, autonomía municipal y otras. Los segundos, inscriben sus “luchas” en los procesos electorales y por los espacios en las esferas del poder
Sin embargo, excepto los partidos de la derecha,  todos resisten las políticas públicas antipopulares y antidemocráticas. Aunque ninguno de estos movimientos reivindicativos sectoriales, se proponen el rompimiento con el sistema, ni derrocar a la burguesía parasitaria, rapaz y antinacional. Por definición, los partidos políticos de “izquierda” deberían tener este propósito. ¡Pero no!  Son sus apoyadores vergonzantes. En esto se basa el Ing. Gomezcaña para sostener que “el sistema actual realmente no tiene salidas populares, es eminentemente capitalista, neoliberal y enemigo del pueblo. Las salidas populares, solo están en la resistencia emanada del poder popular. Defiende territorios, derechos, y recursos para el beneficio común del pueblo. Se organiza, protesta, se apropia y produce nuevas comunidades de lucha y solidaridad con nuevas formas de educación y cultura política y económica, autónoma y solidaria” Pero ¿qué pasa con los partidos, especialmente de aquellos que se hacen llamar de izquierda?
En las resistencias político-electorales hay una importante baja en su actividad. La cultura de castración y sometimiento que ha impuesto el sistema a la gente, no es una cosa menor. Aunque a decir verdad, las debilidades culturales e ideológicas de la inmensa mayoría del pueblo mexicano, también son parte de su responsabilidad. No ha resistido de manera enérgica y auto determinada, a la educación y la  cultura que por ochenta y cinco años nos ha impuesto el priismo. A esto hay que sumarle la enorme experiencia que ha venido acumulando la burguesía mexicana y el sistema capitalista nacional. Tantos años en el poder, los ha convertido en sólidos instrumentos y  retrancas para impedir el ejercicio democrático de la sociedad y han hecho de las resistencias sociales y políticas, instrumentos de acompañamiento que fortalecen las estructuras de su poder
Enfrentar esta compleja situación no es una cosa sencilla. La burguesía mexicana ha creado en sus años de poder, una experiencia política como ninguna otra burguesía en el mundo. El capitalismo mexicano se ha integrado plenamente al capitalismo mundial. Las políticas públicas y el comportamiento de los gobernantes están regidos por los intereses de los grandes consorcios financieros, comerciales y de poder nacional y transnacional. Cualquier partido político, especialmente Morena, que se proponga la toma del poder, transformar el país en beneficio de las grandes mayorías, tendrá que tomar en cuenta, por lo menos, tres enormes complejidades: Un movimiento sectorial y político castrado y desorganizado, un poder nacional y transnacional metidos hasta el tuétano en el esqueleto de la República y siete partidos sirviendo al sistema como comparsas en el ejercicio del poder.
Si MORENA aspira a cambiar el país, debe tomar en cuenta todas estas dificultades. Tejer fino para avanzar en la participación y articulación de los movimientos sectoriales y políticos que compartan su proyecto de transformación, emprender una enorme campaña que muestre el rostro antinacional de la burguesía y generar una organización horizontal, auto determinada, revolucionaria, de las bases de Morena. Sin trabajar en estos objetivos, este partido puede perderse en el camino. Son muchas las acechanzas que enfrenta y sus enemigos y adversarios políticos gozan de una enorme experiencia y de un poder económico cuyas fuentes están en la iniciativa privada, en las transnacionales y en el crimen organizado
¿Estará el pueblo dispuesto a enfrentar estos riesgos por el bien de su causa? Por lo menos, démosle el beneficio de la duda. Pero la condición para intentar estas utopías está en lograr que Morena se convierta en un verdadero partido revolucionario, que abandone sus posiciones socialdemócratas, que combata de verdad el arribismo, el oportunismo y la corrupción. Que no vaya al poder para fortalecer las estructuras estatales sino que se apoye realmente en el pueblo para transformar la cultura política de sus militantes y lograr los cambios que requiere urgentemente la vida  nacional.

Por estas razones, participar en los procesos electorales que vienen, representa un gran reto para Morena y para las fuerzas democráticas. Las filtraciones de prensa que dan cuenta de la molestia que causa en el INE y en el gobierno el próximo registro de este Partido Nuevo, sólo reflejan el miedo de que Morena se convierta en un partido apoyado ampliamente por los electores. PRI, PAN y PRD, van hacer todo lo que esté a su alcance para impedir que se convierta en la principal fuerza del país. ¡Basta ver las conductas políticas de EPN y MAM y lo que queda del chuchinero! El otro asunto es evitar que el rostro de Morena se desfigure por las prácticas electoreras de sus “líderes” Hay que impedir que las actitudes clientelares y arribistas de personajes que no reúnen el perfil político que está plasmado en los estatutos, se impongan. Los destapes anticipados de personas que no son promovidas por las bases, no van con lo que la gente quiere de Morena. Hechos y personas que se están haciendo fuera de la bacinica, sólo desacreditan el esfuerzo de miles de personas que están trabajando por un partido diferente. Ojalá esto se pare, de lo contrario, Morena puede  ir al fracaso

miércoles, 27 de agosto de 2014

Hablemos otra vez de ese partido que mata
Por JESÚS SOSA CASTRO
Asistí a un seminario sobre problemas indígenas y comunidades autonómicas al Estado de Morelos. Desde el sábado, en las carreteras federales que conducen a Cuautla y Oaxtepec, había retenes de la policía federal, del Estado de México y un retén militar a la altura de Tlalnepantla, Morelos. Un verdadero estado policíaco-militar. En contrapartida, la prensa daba cuenta de los secuestros, las fosas clandestinas, de enfrentamientos entre las mafias organizadas y desorganizadas, muertos por aquí y muertos por allá. Represión a los ciudadanos que defienden sus derechos, sus pueblos, sus aguas, sus riquezas. Entonces ¿que cuidan estos señores? ¿Cuándo le declaró la guerra Peña Nieto a los mexicanos?
¡Me quedé patidifuso con lo que se ve en las carreteras de México! Obviamente los criminales, si estos son los que busca la policía y el ejército, no caminan a la luz del día y por las carreteras federales. Hay mucha ingenuidad de las fuerzas represivas para suponer que allí van atrapar a los mafiosos. Lo que quiere el gobierno y sus cuerpos armados, es sembrar la idea en la población de que allí está el “poder” vestido de verde olivo, de azul y de negro para lo que “pudiera ofrecerse” Es una amenaza a la libertad de tránsito y un tente en pie para los pueblos que están defendiendo sus derechos
 Desde Vicente Fox pasando por Felipe Calderón y hoy Enrique Peña Nieto, hay una creciente y preocupante devastación de la vida. Mujeres, hombres, jóvenes y niños, son las víctimas contra las que el sistema político se ha cebado. El priismo se ha convertido en una anormalidad inmoral. Todo lo que hace y toca lo convierte en engaño, en lodo, en truculentas formas de encubrir sus nefastas políticas públicas. En sus 85 años de gobierno ha podrido su quehacer. Ha convertido al pueblo de México en un mundo lleno de desempleados, de hambrientos, de desesperanzados. Está empeñado en criminalizar cualquier resistencia popular. Los espacios públicos están llenos de policías y de soldados. Contravienen la ley, detienen, golpean, revisan y roban. Se comportan como si ellos fueran los dueños de México
¿Contra quién es la guerra? ¿Alguien está por invadirnos? Esa invasión ya la estamos viviendo desde hace décadas. ¿No fue el prianismo quien le abrió las puertas de par en par al imperio y a las transnacionales? ¿No fueron estos partidos y sus corifeos los que hicieron las leyes para que las transnacionales nos despojen impunemente de nuestras riquezas naturales? ¿Acaso no nos hemos dado cuenta que Enrique Peña Nieto es el gran facilitador para que las empresas transnacionales nos impongan el desgaste histórico, aderezado de una civilización capitalista que le abre paso a las derrotas de los múltiples y diversos intentos populares por construir su propia autodeterminación?
Pero los intentos de reavivar las resistencias populares ya vienen en camino. El pueblo sabe que las formas priistas de producir y reproducir la explotación y la opresión serán más complejas, más brutales y más entreguistas, pero el pueblo no arreará sus banderas. Es verdad que el capitalismo salvaje no va a parar sus acciones por razones morales. Su esencia y su naturaleza rapaces, van directas contra las riquezas de los mexicanos. Si tienen que seguirse manchando las manos de sangre lo van a seguir haciendo. Las lisonjas para comprar a opositores seguirán su curso porque siempre habrá traidores a los intereses del pueblo y de la nación. Pero el cinismo de la clase gobernante va a topar con un pueblo que nunca ha sido collón. ¡Los mexicanos sabemos pelear!
La burguesía mexicana ya trae consigo todos los estigmas y el desgaste que ha labrado durante toda su vida. La audacia priista en la entrega de la riqueza nacional, el enriquecimiento cínico de la burocracia política y de los grandes capitostes  están usando el erario nacional, la criminalización de las luchas, el asesinato sin límites contra hombres como Emiliano Zapata, Francisco Villa, Rubén Jaramillo, Luis Donaldo Colosio, Francisco Ruiz Massieu, el cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo y cientos de luchadores sociales, pero nada les valdrá. Todas sus tropelías serán la fuente de su inminente derrota. Seguir reprimiendo y matando a sus opositores no bastarán para acallar la indignación y la lucha de millones de mexicanos que ya se organizan contra las políticas rapaces de la mafia del poder. La que está contaminando los ríos, destruyendo la propiedad social y comunal, ensanchando el abandono de la agricultura mexicana, todo a cargo de una demagogia exacerbada del priismo, tiene sus años contados

La manera en que seguirá ejerciéndose la trillada política priista va a marcar y va a fundar buena parte del desarrollo de la lucha social y de clases. Sus talones de Aquiles se harán más evidentes, más despreciables y más generadores del avasallamiento popular. Esto obliga a todas las fuerzas políticas de izquierda a proponer soluciones revolucionarias que superen el actual estado de cosas. Mantener una lucha ideológica y cultural contra el priismo que lleve al desenmascaramiento de sus falsedades y engaños es necesaria y urgente. Difundir la propuesta de una nueva revolución social es hoy una tarea de todos los patriotas

miércoles, 20 de agosto de 2014

El PRI es una nubosidad densa para encubrir corruptelas y crímenes
Por JESUS SOSA CASTRO
Hoy voy hacer un planteamiento polémico pero real. Espero que mis lectores profundicen en estas ideas. Se trata, en todo caso, de buscar los aportes que se requieren para entender lo que pasa en nuestro país y cómo enfrentar, a esas fuerzas políticas que están acabando con el país. Con mucha frecuencia las acciones revolucionarias están dirigidas al aparato burocrático que encabeza el gobierno. Como si éste no respondiera al pensamiento y a los intereses profundos, históricamente presentes en el alma de lo que es la cultura priista
Me explico (*) ¿Por qué el PRI lleva ochenta y cinco años en el poder, sin que hasta ahora lo hayamos podido derrotar? ¿Realmente son sus estructuras partidistas y el dinero público lo que lo han mantenido en el poder? ¿Es la eficiencia de sus “líderes” y su capacidad corruptora lo que lo han mantenido en el poder durante casi nueve décadas? Es esto, pero hay algo más importante. El priismo es el alma y el corazón de la burguesía mexicana, es su espíritu y su mundo interno, intimo, que ha sido edificado como un aprendizaje histórico de esta burguesía en su surgimiento y en su devenir
El origen del priismo es el núcleo creativo, discursivo y afectivo  de toda la clase y de cada uno de los capitalistas mexicanos. Es su intimidad profunda. En ella se guardan, mediante la memoria colectiva, sentires, saberes, conocimientos aprendidos y vividos, de opresión y explotación. El priismo es el cultivo permanente del modo de ser del burgués mexicano. De esa alma y espíritu profundos salen, se expresan, se materializan las obras y productos en los que ellos se depositan. El priismo es un conjunto de acciones mediante las cuales el capitalista mexicano se expresa y manifiesta; es el corporativismo, el patrimonialismo, el clientelismo, es su patrioterismo vulgar, un estilo especial de corromper conciencias, de fraguar matanzas y asesinatos masivos y selectivos que no siempre dejan huellas evidentes
El priismo ha aprendido a crear una nubosidad densa para encubrir sus hechos, sus corruptelas y sus crímenes. Mata y hace leyes burlándose y riéndose de la gente. Maneja una solidaridad interclasista que no perdona, actúa como una mafia. Con claridad cristalina asume que el capital no tiene patria y por tanto, está dispuesto a vender lo que sea del país. Habla siempre de patria, soberanía, de nación y tolerancia. Aunque a ojos vistas todo es una falsedad que da paso al autoritarismo, a la intolerancia, a las palabras que encubren la defensa real de los derechos y las libertades de los mexicanos. Nada de lo que hacen los priistas es neutral, todo es doblez y disimulo, simulación y astucia de la peor ralea
El PRI es por tanto, el blanco contra el cual hay que concentrar todas las fuerzas y todos los esfuerzos revolucionarios. Y no es por el hecho de que el Partido Revolucionario Institucional haya vuelto a ganar la presidencia de la República en la que se ha montado desde 1929, año de su fundación. Este instrumento de poder es lo que es, aunque se encubra con distintas denominaciones, siglas y razones sociales. Aunque llegara a desaparecer como PRI o cambiara de nombre, el priismo seguirá, para mal, siendo la cultura, los sentimientos y el alma del comportamiento de los mexicanos
El priismo no es simplemente una estructura estatal ni mucho menos una institucionalidad partidista. Es, sobre todo, una relación y un ejercicio de Poder de la burguesía. Es la forma predominante en la actualidad con la que se encubre y realiza el poder del dinero. En el priismo, el capital, la burguesía mexicana, han cristalizado sus más eficaces artes de dominio de los trabajadores. Los mantiene, calculadamente, lejos y distantes de de sus derechos laborales y de ese mando al que legítimamente les corresponde. Opera así para evitar que el pueblo logre ubicar el ejercicio de su poder y cancela su autodeterminación política para poder liberarse de todas las consecuencias del sistema priista
El priismo es, por tanto, una cultura de opresión, de explotación, un modo particular y específico de enajenar a los trabajadores y a los ciudadanos. Una manera singular -altamente refinada- de mantenerlos en la voluntad de no ejercerse como actores de su propia vida, sino al contrario, como siervos y dependientes del capital, creyendo que todo debe esperarse del Estado, del gobierno, de los de arriba. Cuando afirmo que el priismo es una cultura de poder, de opresión y explotación, propias de la burguesía mexicana, estoy diciendo que el priismo es un conjunto de valores y de ideales compartidos por la clase de los capitalistas quienes desde 1917 impusieron en México su dominación, su control y su mando sobre el pueblo
Esos valores y esos ideales hacen que la burguesía mexicana tenga y sostenga similares costumbres en todas las manifestaciones del poder. Aplica iguales procedimientos y formas para enajenar artefactos, tecnologías y maneras de hacer y ver el mundo mexicano, a la imagen y semejanza de las relaciones deshumanizadas que esa clase impone entre los humanos y en la naturaleza. ¡Eso es el priismo! Un poder que va más allá de una estructura partidaria, es el espíritu y el alma del sistema capitalista globalizado que está destruyendo todo, entregando todo. El pueblo no le importa, no le preocupa ni su situación ni su futuro. Es el PRI nuestro adversario a vencer

(*) Ideas y conceptos contenidos en un texto que ha sido publicado en las redes sociales con el seudónimo de Valente 

viernes, 15 de agosto de 2014

Entrevista de Aldo Fabián a JESUS SOSA CASTRO
Aldo Fabián.  Estoy en el espacio de trabajo de los Comités territoriales del Distrito Dos Federal  JESUS SOSA CASTRO es el enlace para cumplir con la tarea de la consulta ciudadana. Jesús:
Desde mayo empezó Morena una Consulta cuyo lema es “que nos pregunten a todos” ¿qué significado encierra esa pregunta y como ha reaccionado la gente ante ella?
JSC.- Desde la campaña electoral del 2012, Andrés Manuel afirmaba que el proyecto de Peña Nieto contenía una propuesta privatizadora para los energéticos del país. No se equivocó el Dirigente de Morena. El gobierno ha entregado las principales riquezas naturales que son propiedad de la nación. Esta decisión anticonstitucional fue apoyada por los diputados y senadores del PRI, el PAN y de una facción del PRD. Las reformas más agresivas en contra del pueblo han sido la fiscal, la educativa y las reformas energéticas. La privatización del petróleo, el gas y la energía eléctrica son, a mi juicio, las más regresivas porque están atentando en contra de la propiedad de la nación y en consecuencia, de todos los mexicanos. Al principio, el pueblo estaba pasmado porque no sabía cómo reaccionar. Hoy que el gobierno ha modificado los artículos 25, 27 y 28 constitucionales y aprobado las leyes secundarias, la gente se está dando cuenta de que ninguna de estas reformas tiene que ver con los intereses del pueblo y por eso su participación al lado de la consulta que anda haciendo Morena. Se observa una participación creciente por parte de los ciudadanos en defensa de los intereses nacionales
Aldo Fabián. De acuerdo con tu opinión ¿cuál es, entonces, la importancia de esta consulta?
JSC.- Es un hecho que las transnacionales ya están operando en varias regiones del país.
Doscientas sesenta y siete firmas extranjeras ya operan en el país, mientras Peñoles, Frisco y Fresnillo, empresas nacionales, están en la disputa por más territorios. En los Estados de Chihuahua, Coahuila, Durango, Puebla y Morelos, para no citar más que estos Estados, las empresas extranjeras ya están en lo suyo. Sólo en Puebla, se han dado 22 concesiones a empresas canadienses, chinas y a Calos Slim. Los pueblos se están rebelando porque no sólo es irregular la ocupación de sus tierras, sino que la forma de explotarlas es irracional por la enorme contaminación que provocan. Las leyes secundarias que tienen que ver con la supuesta ocupación temporal de las tierras, contiene la idea de que una vez explotadas, éstas pueden ser devueltas a sus dueños. Todo esto, Fabián,  está ocurriendo sin ningún tipo de consulta a sus auténticos dueños que son los mexicanos. Ni el gobierno, ni Peña Nieto pueden disponer discrecionalmente de los energéticos, son de la nación y por lo tanto, somos los mexicanos los únicos que podemos decir si estamos de acuerdo o no con estas políticas entreguistas y antinacionales que está imponiendo este gobierno, apoyado por los serviles diputados y senadores. Por eso es enorme la importancia de que el pueblo se pronuncie en una consulta que se hará el 7 de junio del año 2015
Aldo Fabián.- ¿Por qué apostar por la consulta y no por otros mecanismos de lucha?
JSC.-  Yo comparto la opinión de AMLO cuando afirma que nuestra lucha es pacífica. Sostengo que en nuestro país como en otros, se han ensayado otras formas para alcanzar objetivos de cambio y al final no los han logrado. En México tenemos que rescatar el espíritu del artículo 39 constitucional y hacer que sea el pueblo el que de manera soberana opine y decida sobre todo cuanto tiene que ver con su futuro. Y la forma que hoy tenemos a la vista está en la consulta de junio del año que viene. Esa es la forma que el pueblo puede poner en juego su fuerza para hacer posible la expresión de su voluntad. Yo espero que masivamente la gente rechace estas reformas regresivas, rapaces, que un grupo de traidores le quieren imponer. Esto no lo podemos permitir sin antes hacer todo cuanto podamos para revertir esas reformas antinacionales
Aldo Fabián.- Por último, Jesús
¿Qué riesgos existen si la SCJN no le da entrada a esta demanda ciudadana?
Aldo Fabián, quiero decirte que el artículo 35 Constitucional dice a la letra en su fracción VIII que es un derecho constitucional “Votar en las consultas populares sobre temas de trascendencia nacional” que estas consultas serán “convocadas por el Congreso de la Unión a petición de: a)    El Presidente de la República, b)    El equivalente al treinta y tres por ciento de los integrantes de cualquiera de las Cámaras del Congreso de la Unión; o c)    Los ciudadanos, en un número equivalente, al menos, al dos por ciento de los inscritos en la lista nominal de electores, en los términos que determine la ley” y en el inciso 2º se dice que “ Cuando la participación total corresponda, al menos, al cuarenta por ciento de los ciudadanos inscritos en la lista nominal de electores, el resultado será vinculatorio para los poderes Ejecutivo y Legislativo federales y para las autoridades competentes” Como ves, la consulta de Morena no sólo es constitucionalmente posible, sino que además, los resultados son vinculatorios, es decir cualquiera que sea el resultado de la voluntad popular, serán de aplicación obligatoria por los poderes constitucionales. Si esto no es respetado por la SCJN, por el Congreso o por el poder ejecutivo, puede verse el país envuelto en una serie de revueltas sociales que incidirían en la situación política y económica que ya estamos viviendo. El riesgo de que esto ocurra, será responsabilidad de los poderes de la unión. Yo espero que esta consulta se haga y que sean los ciudadanos, mediante su voto, los que decidan la suerte de nuestras riquezas naturales. La violencia no vendrá del pueblo, de eso estoy absolutamente seguro

Gracias Aldo Fabián por esta entrevista

miércoles, 13 de agosto de 2014

Los patiños del Congreso y los denarios de la traición
Por JESUS SOSA CASTRO
¡Ni cómo presumir! La mayoría de los miembros del Congreso se dedicaron a tirar baba y a hacer leyes que van en contra de los intereses del pueblo y de la nación. Las cámaras se convirtieron en espejos al través de los cuales, los ciudadanos vimos el grado de abyección con que se condujeron y se conducen estos llamados “representantes populares” Nunca como en estos tiempos habíamos visto tanto entreguismo y felonía. Por su culpa, el país es hoy el receptáculo de la descomposición política y social, de la depresión económica y de la pérdida de la soberanía nacional. En los campos de la política, la economía y la seguridad social hay puros retrocesos

Si la mayoría del pueblo vive en un profundo sopor y sólo mira lo que están haciendo los patiños del imperio, deberíamos empezar a explicarnos las causas de esta conducta. Dejar pasar las reformas regresivas de Peña Nieto sin las protestas y movilizaciones necesarias para impedirlas, es un hecho que nos agravia como pueblo y como país. ¡Pero los hechos allí están! La gente no se mueve. Quedó atónita por tantos reformones, no tuvo tiempo ni para reaccionar. No quiere poner en manos de corruptos y de traidores, el destino de su participación. Tiene el temor de que negocien en su nombre imponiéndole una nueva traición. Los corruptos y los corruptores así se comportan. Siempre han llenado de descrédito el ejercicio de la política
  
En un tiempo, los ciudadanos supusieron que sus “representantes” iban a defenderlos de las políticas rapaces de la oligarquía. Sus discursos demagógicos y llenos de lugares comunes, parecían ir en esa dirección. Lo presumían cantándolo como cotorras en celo. La gente pensaba que iba a respirar aires nuevos, anhelaba que hubiera cambios a su favor, sensibilidad política, pluralismo y una correcta administración de los recursos humanos, económicos y materiales de la nación. Pero la atmósfera renovadora y con ella los proyectos sociales, las políticas públicas y las “obras” concluyeron en un Frankestein que sus progenitores  abandonaron de manera vergonzante en las calles del país

Después de casi dos años de este gobierno, ¿qué fue lo que pasó con los levanta dedos del Congreso? ¡Se entregaron por treinta monedas de plata, al viejo estilo de Judas! Perdieron el pudor, la vergüenza y se echaron en los brazos de Peña Nieto entregando el país y sus riquezas naturales. Resultaron unos corruptos y unos traidores. Son una vergüenza  nacional. La mayoría de los diputados y senadores van a terminar su período con pena y sin gloria. Su descrédito moral y político es de tales dimensiones, que difícilmente lo recuperarán en los tiempos que vienen
Perder el contacto con sus electores y con la inmensa mayoría de los ciudadanos no les importó. Hoy son motivo de repudio generalizado por haber entregado lo que es de los mexicanos. No supieron oír las opiniones de sus representados, pasaron por alto el espíritu del Artículo 39 constitucional y terminaron en los brazos del insufrible ocupante de los Pinos. Abandonaron el piso político que les correspondía y se convirtieron en una burocracia que se arrastra por dinero. Todo devino en la pérdida de autoridad moral y en el abandono total de la honestidad que tanto cacarearon

Es de lamentarse que el gobierno y el Congreso hayan permitido la pérdida de la soberanía popular y que México sea el traspatio en el que se están asentando ya los poderes de las transnacionales. El espejo en el que ahora se ven está lleno de inmundicia y de traiciones que ya cobrará el pueblo de México. Perdieron la oportunidad de oír a la gente y adoptaron un lenguaje y una conducta autocomplacientes para halagar a sus patrones. Se fueron por el carril de la banalidad y de las mentiras y pronto van a darse cuenta de sus errores y de su entreguismo. El país esta resquebrajándose y sólo su ceguera mendaz insiste en ver un futuro promisorio para los mexicanos. ¡Vaya desvergüenza! 


Los que abandonaron sus ideales y las necesidades de la gente, lo hicieron mal y de manera irresponsable. Actuaron así porque hubo chequera llena. No tuvieron la capacidad para entender los problemas del país y menos comprendieron los recurrentes planteamientos de los sectores vulnerables de México. Jamás percibieron la importancia de las demandas de la gente. Sus viejas formas, autoritarias y unipersonales, los hizo perder la oportunidad de pasar a la historia impulsando los cambios que el país demandaba. Es más, ni siquiera supieron irse con la dignidad y cubriendo las formas a que estaban obligados. Simplemente se van abandonando a su suerte las reformas que parieron. En su huída se van a llevar el testimonio de su fracaso, la indiferencia, la desaprobación y el repudio de los mexicanos. ¡¡Qué pena por ellos!! 

miércoles, 6 de agosto de 2014

 En  Morena hay grupos y personas que le andan soplando al jocoque
Por JESÚS SOSA CASTRO
El trabajo para recolectar firmas para la consulta ciudadana no ha sido una tarea fácil. Tenemos un pueblo medio atolondrado, reacciona poco. Pareciera que Peña Nieto y sus vasallos, ya hace rato que nos tomaron la medida para jodernos por un largo período. Desde luego que hay una franja grande de mexicanos que sí estamos haciendo algo por México. Pero a estas alturas, los del PRI y los del PAN ni petates ni hamacas nos dejaron. Estamos quedando como los palos de gallina: pelados y cagados.
Reunir dos millones de firmas para atajar las reformas de estos antipatriotas, no es una cosa sencilla. Es una tarea que sólo la convicción de acabar con estas políticas nos ha hecho  trabajar desde dos mil seis a la fecha. Ya llevamos ocho años seguidos trabajando contra estas acciones antipopulares. Nuestros materiales de trabajo son las convicciones, los ideales y la responsabilidad con nuestros hijos y con el país. Pero la mayoría, hasta ahora, sigue durmiendo el sueño de los justos. Les vale un soberano cacahuate que nos estén asaltando a campo traviesa y se lleven nuestros recursos naturales. Se están aprovechando  de que la mayoría de los mexicanos estamos comiendo camote  
Y aunque no sabemos cuál pueda ser el resultado final de la consulta ciudadana,   miles de compatriotas seguimos corre que corre para reunir los dos millones de firmas. Pues el gobierno y sus patiños, están poniendo en juego toda su escuela de maniobras y marrullerías para pasar por alto la demanda de la gente. Sus apoyadores son unos miserables, incultos, levanta dedos y agachones, pero ellos son los que aprueban las leyes y los que están llevando a México al desbarrancadero. Por eso resultad verdad que “sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación”
Que todo esto suceda en las filas de la derecha es normal. Lo que resulta inexplicable es  que en las de la izquierda haya grupos y personas que también le andan soplando al jocoque. Ya afloran las intenciones y la cultura de los que quieren huesos y dinero. Por décadas, a los suspirantes a los puestos de representación popular, les bastaba ser un “poco inteligentes y un mucho lambiscones” para que las cúpulas del poder los invistieran  como candidatos y así, disponer de lo que buscaban con ahínco. No tenían que demostrar ser honestos, tener proyecto político, ni ganarse con trabajo el derecho a ser candidatos. Todo se les daba en bandeja de plata
¡De pronto eso se les acabó! Amén de errores y de inercias que obviamente todavía existen en este partido, a los gandayas y arribistas ya los estamos acotando. El trabajo, la honestidad, la capacidad política e intelectual comienzan a ser los factores fundamentales que determinan los accesos a los encargos públicos.   Manejarse como grupos de presión en las filas de Morena, son parte de los viejos resabios de una cultura que le ha dado golpes de muerte a las instituciones republicanas y al país. Esos caballitos de mar ya no contribuyen ni al proyecto de Morena ni al surgimiento de nuevas formas para hacer política. Quienes hacen eso, son la expresión de lo viejo, de lo que viene del PRIANRD
Cito algunos casos. Al formarse el Movimiento Regeneración Nacional, Morena, pensábamos que en sus filas no cabrían los representativos del grupismo y del arribismo. ¡Pero llegaron! Suponíamos que la nueva militancia se iba a comportar a la altura de las nuevas exigencias de un partido diferente, y al poco tiempo también cayeron en lo mismo. Con estos vicios de por medio, se llegó al punto de hacer la consulta popular para que los ciudadanos digan si están o no de acuerdo con las reformas energéticas de Peña Nieto y sus patiños. Se nombraron enlaces para garantizar el trabajo en todos los distritos del país y muchos pensaron que había llegado la hora de las candidaturas, desatándose la carrera de los búfalos
Los que quedaron fuera de los encargos, pensaron que se les había caído el pastel y empezaron a poner en juego sus mañas y sus viejos recursos de presión contra los órganos de dirección. Empezaron haciendo tortuguismo en el trabajo, reclamaron territorios como suyos, retuvieron las hojas de firmas y hoy, las están manejando como instrumentos de presión para reclamos indebidos que les permitan cuotas de poder. Inconcebible que se estén conduciendo en Morena como representantes de las prácticas del PRI. No han entendido que están en otro partido que asume ser diferente.  

Son grupos ciegos, sectarios y de mala leche. ¿De dónde les viene eso de territorios privados? Ese concepto no puede ser aceptado por nadie. Lo único que llevaría a no entrar en esos espacios, es que ya estuvieran trabajados, con resultados evidentes a favor de la consulta. De no ser así, cualquier moreno puede trabajar en ellos porque es su obligación. Nadie que sólo hable tiene derecho a reclamar espacios como propios. Lo que muestra quién es quién, es el trabajo. Lo demás es grilla barata y sus apologistas unos pájaros nalgones. Las mañas y el comportamiento de que presumen, ya no caben aquí. Puede ser el PRI o el PRD lo que buscan. Los de acá, somos diferentes