Resistir Escribiendo

 

La derecha, la CNTE, la estupidez

Por JESÚS SOSA CASTRO

Si fue la derecha chiapaneca la que obstruyó la gira del presidente en varios municipios y ciudades de Chiapas, se podría suponer que los facciosos dirigentes magisteriales de las secciones 7 y 40 están orinándose fuera de la bacinica. Su comportamiento y sus alianzas con lo más nefasto de la derecha golpista y cristera se están convirtiendo en una enfermedad donde el odio en contra de AMLO, está tejiendo apresuradamente las redes en las cuales quedarán atrapadas como fuerzas políticas sin haber puesto en juego ningún proyecto político. Su pérdida del sentido común está apresurando su caída en el mayor descrédito, justo en los momentos en que la mayoría de sus cuadros dirigentes, están en la picota de la justicia por ladrones, corruptores y buenos para nada

Si fueron maestros miembros de las secciones 7 y 40 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación los que impidieron el paso al presidente, injuriándolo y presionándolo para que en los retenes mismos les “resolviera sus problemas” sería una muestra más de que en la CNTE no solo se defienden viejos intereses alcanzados en negociaciones oscuras entre los lidercillos de esas secciones y las estructuras del régimen neoliberal, aquellas  que, durante décadas sirvieron a los intereses de los grupos que impusieron una reforma educativa en la que nunca estuvieron representadas las demandas de los maestros sino los de aquellos que quisieron convertir la educación en una mercancía

Quienes seguimos de cerca los acontecimientos que están presentes en la escena pública podemos afirmar que cuando se trabaja para acabar con las viejas prácticas políticas, con los intereses de grupos mafiosos y con privilegios alcanzados de manera ilegal, las coincidencias políticas de los extremos se dan con demasiada frecuencia. La extrema derecha y la extrema izquierda, FRENA y la CNTE en este caso concreto, no solo se juntan para bloquear al presidente y a sus acciones de gobierno, sino que hasta coinciden en sus métodos y formas de provocación. Hacen uso de un lenguaje que insulta la inteligencia de cualquier ciudadano que observa lo que pasa y lo que se hace en el país

El drama y los lloriqueos de los que se agrupan en Va por México y los dirigentes de la CNTE pareciera que quieren mayor financiamiento de empresarios, políticos venidos a menos, de las mafias y de los Estados Unidos. No soportan que la justicia finalmente esté encuerando y llevando a los tribunales a sus criminales de cuello blanco. Quieren desviar la atención sobre lo que a nivel nacional está ocurriendo en la lucha contra la corrupción y sobre lo que se ocultaba en los entresijos de funcionarios y políticos como Ricardo Anaya, los Duarte, el Tomandante Borolas y Peña Nieto entre otros muchos más del PAN, del PRI y de la CNTE, que hicieron de los moches y del tráfico de influencias el modus vivendi de toda esta bola de canallas

No asombra ni se está en contra de la protesta de aquellos sectores que no se les han resuelto sus problemas. Pero hacer uso de los bloqueos a la actividad de un presidente que trabaja y atiende las necesidades de la gente yendo personalmente donde están los problemas, dando la cara al pueblo, propiciando la participación de los actores sociales e impulsando las soluciones colectivas, es algo que no entiende la oposición charrificada y golpista. Lo que hicieron los maestros de la CNTE y los oportunistas de la derecha que siempre están al acecho para estorbar el avance de la 4ª transformación, los está llevando a ganarse a pulso el desprecio nacional, cuando ningún presidente antes de AMLO los había atendido en sus demandas fundamentales consistentes en echar abajo la llamada reforma educativa, darle el valor ético y moral al trabajo del maestro, acabar con la represión de que eran objeto por los regímenes prianistas y devolverles sus plazas de trabajo que les habían arrebatado el gobierno y el SNTE

Como cualquier grupo social, los maestros y sus compañeros de viaje ya sean de extrema derecha o de extrema izquierda, tienen derecho a no compartir todas las políticas del gobierno. Pero la lucha que está encabezando el presidente para terminar con la corrupción en el país, especialmente en los sindicatos y en las esferas del gobierno, no puede ser bloqueada por grupos de provocadores porque nadie les ha dado el derecho de regatearle al ejecutivo federal el recurrir a los municipios, a los pueblos originarios, al México profundo, a oír, atender y a explicar los avances y los problemas que está enfrentando y resolviendo su gobierno. Ojalá los maestros pongan en juego su inteligencia, reconozcan la atención que están recibiendo sus demandas y se alejen de las locuras y de la estupidez que los identifican con los golpistas del PRIAN, con FRENA y con los que desde los sótanos de la política preparan las condiciones para descarrilar el proyecto de nación que estamos apoyando la mayoría de los mexicanos.